DERECHOS HUMANOS
Hace más de 60 años, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó y proclamó la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Recordemos el artículo 18 sobre la libertad religiosa:
“Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observación.”
Pero la realidad es muy distinta. Veamos como ejemplo dos de los puntos de este artículo:
- Manifiestar su religión. En muchos países, este derecho sólo existe para las iglesias reconocidas o inscritas y bajo un estricto control del Estado y una serie de restricciones.
- Cambiar de religión. En muchos países, el musulmán que decide abrazar al cristianismo es considerado un traidor y se convierte en la vergüenza de su familia. Otros países han adoptado leyes contra la conversión para frenar el crecimiento del cristianismo.